lunes, 19 de marzo de 2012

Salpicado de negro sobre rojo

Todo lo que es blanco resulta sucio.

No soy el que escribe
Soy sólo el que recita
al oído sordo de un cuerpo frío.
Recita gritando, en la agonía del último respiro.
¿Dónde fue la belleza del rocío?

¿Qué habrá sido de los grandes árboles de la plaza?
(éstos de ahora me parecen más pequeños)
¿Qué fue de mi sonrisa?
¿En cuál mirada se habrá perdido?
Vos, oído sordo de un cuerpo frió, también te has perdido.

viernes, 9 de marzo de 2012

Carne para picar


¿Qué esperás María? un giro en torno al universo plagado de simples giros de notas.
Acaso magia en tus ojos latentes, expectantes, vacíos de toda ella.
Una simple chispa en el momento exacto del tiempo.
Una simple luminiscencia plasmada de impregnantes arcoiris, envueltos, todos ellos, en la más fina nieve blanca.
Terminás polícroma, no entendés ningún color que veo, no sé desde cuándo el mundo lo compartimos, desde cuándo el mundo es uno sólo.
Mirate, vacía, blanca, frígida, nada.
No te mires, vacía, blanca, frígida, nada.
Hace de cuenta que sos la belleza, que sos la lindura, toda carcomida por impíos gusanos comecarne.
Tremendamente eterna, incorruptiblemente vos.

lunes, 5 de marzo de 2012

Buenas personas.

Me decís que todo es posible en un atardecer anaranjado hasta el violeta.

Ellos no saben de esos colores, no saben siquiera nombrarlos, por lo que no disfrutan de lo 

que disfrutamos. 

Pensaste, en ese atardecer, que son pobres, ignorantes y no tienen nada.

Te lo digo para que llores de ignorancia, 

ellos tienen la calle mientras vos disfrutás de lo volátil. Sos pobre. 

Llorá, ignorante.

Los poemas de amor son una mierda.

La amo cuando se sienta frente al piano, la amo cuando apoya su cabeza en mis hombros y con su respiración marca el tiempo con el que sonrío...