Hace 4 días tengo un cadaver en el piso de mi habitación. El cuerpo está hinchado, la sangre cuajada en la madera despide el olor de la putrefacción. Los ojos opacos hundidos son devorados por pequeñas hormigas rojas adeptas a la carne. Los organos empezaron a licuarse y a drenarse por sus propios orificios.
Fue un cuerpo suicida, se mató solito.